Artroscopia del hombro.
La artroscopia es un procedimiento que los cirujanos ortopédicos y traumatólogos utilizan para inspeccionar, diagnosticar y reparar problemas en el interior de una articulación.
La palabra artroscopia viene de dos palabras griegas, “artroplastias” (articulación) y “skopein” (mirar). El término significa literalmente “mirar dentro de la articulación”. Durante la artroscopia del hombro, el cirujano inserta una pequeña cámara, llamada artroscopio, en la articulación del hombro. La cámara muestra imágenes en una pantalla de televisión, y el cirujano utiliza estas imágenes para guiar los instrumentos quirúrgicos en miniatura.
Debido a que el artroscopio y los instrumentos quirúrgicos son de menor tamaño que el instrumental habitual, el cirujano puede utilizar pequeñas incisiones (cortes), en el lugar de incisiones más grandes necesarias para la cirugía estándar abierta.
Esto se traduce en menos dolor para los pacientes, y en un menor tiempo necesario para recuperarse y volver a las actividades habituales.
La artroscopia de hombre se ha realizado desde la década de 1970. Se ha conseguido que el diagnóstico, el tratamiento y la recuperación de la cirugía sea más fácil y más rápida que con técnicas abiertas previas. Todos los años se producen mejoras en el campo de la artroscopia de hombro a medida que se desarrollan nuevos instrumentos y técnicas.
Anatomía.
El hombro es una articulación compleja que es capaz de realizar más movimientos que cualquier otra articulación del cuerpo. Se compone de tres huesos: el hueso del brazo (húmero), el omóplato (escápula) y la clavícula.
- La bola y el zócalo. La cabeza del hueso del brazo superior encaja en una cavidad redondeada en su omóplato. Este zócalo se llama la glenoides. Un tejido resbaladizo llamado cartílago articular cubre la superficie de la bola y el zócalo. Se crea una superficie lisa, sin fricción que ayuda a que los huesos se deslicen fácilmente uno sobre el otro.
- La glenoides está rodeada por un fuerte cartílago fibroso llamado el rodete glenoideo. Dicho rodete forma una junta alrededor del zócalo, añade estabilidad, y amortigua la articulación.
- Cápsula del hombro. El conjunto está rodeado por bandas de tejido llamadas ligamentos. Ellos forman una cápsula que contiene la articulación. La superficie inferior de la cápsula está recubierta por una membrana delgada llamada membrana sinovial. Se produce el líquido sinovial que lubrica la articulación del hombro.
- Manguito de los rotadores. Cuatro tendones al rededor de la cápsula del hombro que ayudan a mantener a la cabeza del húmero centrada en la cavidad glenoidea del hombro. El conjunto formado por dichos tendones se llama “manguito de los rotadores”. El manguito cubre la cabeza del húmero y se une a su omóplato
- Bursa. Hay una bolsa de líquido lubricante llamado bursa entre el manguito de los rotadores y el hueso en la parte superior de su hombro (acromion). La bursa ayuda a que los tendones del manguito de los rotadores se deslicen suavemente al mover el brazo.
¿Cuándo se recomienda utilizar una artroscopia de hombro?
Su médico puede recomendarle una artroscopia de hombro, si usted tiene una situación de dolor que no responde al tratamiento no quirúrgico. El tratamiento no quirúrgico incluye reposo, fisioterapia, y medicamentos o inyecciones que pueden reducir la inflamación. La inflamación es una de las reacciones normales de su cuerpo a una lesión o enfermedad. En una articulación del hombro lesionado o enfermo la inflamación causa la hinchazón, el dolor y la rigidez.
Lesiones de sobrecarga y el desgaste relacionado con la edad son responsables de la mayoría de los problemas de hombro. La artroscopia de hombro puede aliviar los síntomas dolorosos de muchos de los problemas que dañan los tendones del manguito rotador, labrum, cartílago articular y otros tejidos blandos que rodean la articulación.
Procedimientos artroscópicos comunes incluyen:
- La reparación del manguito de los rotadores
- Eliminación de exceso de hueso (Acromion)
- La eliminación o la reparación del labrum.
- Reparación de ligamentos
- La eliminación de tejido inflamado o cartílago sueltos
- Reparación de luxación recurrente de hombro
Procedimientos menos comunes, tales como liberación de nervios, la reparación de fracturas, y la extirpación de quistes también se pueden realizar utilizando la artroscopia. Algunos procedimientos quirúrgicos, como las artroplastias de hombro, todavía requieren cirugía abierta, con incisiones más amplias.
Su cirujano ortopédico/traumatólogo le puede pedir que vea a su médico de cabecera para asegurarse de que usted no tiene ningún problema de salud que deben ser abordados antes de la cirugía. Pueden ser necesarios análisis de sangre, electrocardiograma, o una radiografía de tórax para realizar con seguridad su cirugía.
Si usted tiene ciertos riesgos de salud, puede ser necesario una evaluación más extensa de la cirugía. Asegúrese de informar a su cirujano ortopédico de cualquier medicamento o suplemento que esté tomando. Es posible que tenga que dejar de tomar algunos de ellos antes de la cirugía.
Si usted es generalmente sano, su artroscopia muy probablemente se llevará a cabo de forma ambulatoria. Esto significa que usted no tendrá que pasar la noche en el hospital.
El hospital o centro quirúrgico se comunicará con usted antes de tiempo para dar detalles específicos sobre su procedimiento. Asegúrese de seguir las instrucciones de la hora de llegada al hospital y especialmente sobre cuándo dejar de comer o beber antes de la cirugía. Antes de la operación, un miembro del personal de anestesia hablará con usted acerca de las opciones de anestesia. La artroscopia de hombro se realiza con mayor frecuencia utilizando los bloqueos nerviosos regionales que adormecen el hombro y el brazo. Este medicamento anestésico se inyecta en la base de su cuello por encima de la altura de su hombro. Aquí es donde se encuentran los nervios que controlan la sensibilidad en el hombro y el brazo. Además del uso de anestésicos durante la cirugía, el bloqueo del nervio ayudará a controlar el dolor durante unas horas después de la finalización de la cirugía.
Muchos anestesistas combinan bloqueos nerviosos con sedación o anestesia general ligera, porque los pacientes pueden llegar a sentirse incómodos al quedarse en una misma posición durante el período de tiempo necesario para realizar la operación. La mayoría de los procedimientos artroscópicos necesitan menos de una hora, sin embargo, la duración de su cirugía dependerá de lo que el cirujano encuentre y qué reparaciones son necesarias.
Posicionamiento y Preparación
Una vez en el quirófano , se le colocará de manera que el cirujano pueda posicionar fácilmente el artroscopio para tener una visión clara del interior de su hombro. Las dos posiciones más comunes de los pacientes para realizar la cirugía artroscópica del hombro son:
- Posición en silla de playa: Esta es una posición semi-sentada similar a sentarse en una silla reclinable.
- Posición en decúbito lateral: En esta posición, el paciente se acuesta sobre su lado en la mesa de operaciones.
En esta posición, el paciente se acuesta sobre su lado en la mesa de operaciones. Cada posición tiene algunas ventajas. Los cirujanos seleccionan la posición basados en el procedimiento que se realiza , así como su formación individual.
Cuando esté ubicado, el equipo quirúrgico eliminará el vello, si es necesario, y luego se extenderá una solución antiséptica sobre su hombro para limpiar la piel. Cubrirán el hombro y el brazo con paños estériles, y lo más probable es colocar el antebrazo en un dispositivo de sujeción para asegurar que su brazo se queda quieto.
Procedimiento
En primer lugar el cirujano inyecta fluido en el interior del hombro para inflar la articulación. Esto hace que sea más fácil ver las estructuras de su hombro a través del artroscopio. Luego, el cirujano hará una pequeña incisión en el hombro ( aproximadamente del tamaño de un ojal ) para el artroscopio. El fluido fluye a través del artroscopio para mantener la visión clara y el control de la hemorragia. Las imágenes del artroscopio se proyectan en la pantalla de vídeo que muestra a su cirujano el interior de su hombro, y cualquier daño.
Una vez que el problema está claramente identificado, el cirujano inserta otros instrumentos pequeños a través de incisiones separadas para repararlo. Se utilizan Instrumentos especializados para tareas como afeitar, cortar, agarrar, paso de suturas y anudado. En muchos casos, los dispositivos especiales se utilizan para anclar puntos de sutura en el hueso.
Su cirujano puede cerrar las incisiones con suturas o tiritas esterilizadas (pequeñas tiritas ) y cubrirlos con un vendaje compresivo grande y suave.
Recuperación/postoperatorio. Después de la cirugía , permanecerá en la sala de recuperación durante 1 a 2 horas antes de ser dados de alta. Las enfermeras vigilarán su capacidad de respuesta y proporcionarán medicamentos contra el dolor, si es necesario. Usted necesitará que alguien lo lleve a casa y permanezca con usted por lo menos durante la primera noche en el hogar.
Aunque la recuperación de la artroscopia es a menudo más rápido que la recuperación de la cirugía abierta, todavía puede tomar semanas para que la articulación del hombro para recuperarse por completo. Usted puede tener un poco de dolor y malestar durante al menos una semana después de la cirugía. Si usted ha tenido una cirugía más extensa, sin embargo, pueden pasar varias semanas antes de que desaparezca el dolor.
El hielo ayudará a aliviar el dolor y la hinchazón. Si es necesario, su médico le puede recetar medicamentos para el dolor. Algunos pacientes se sienten más cómodos para dormir en una silla reclinable o apoyados en la cama durante los primeros días después de la cirugía. Pocos días después de la cirugía , es posible reemplazar el vendaje grande por una apósito simple.
Puede ducharse una vez que sus heridas ya no están drenando, pero trate de no empapar ni rozar sus incisiones. Lo más probable es que necesite un cabestrillo o inmovilizador especial para proteger su hombro. Su cirujano le explicará cuánto tiempo necesitará dicha inmovilización.
La Rehabilitación juega un papel importante en conseguir que pueda volver a sus actividades diarias. Un programa de ejercicios le ayudará a recuperar la fuerza del hombro y el movimiento.
El cirujano desarrollará un plan de rehabilitación con base a los procedimientos quirúrgicos requeridos . Si usted ha tenido una reparación quirúrgica más complicada , el cirujano puede prescribirle fisioterapia para que su recuperación sea supervisada.
Es importante que usted haga un gran esfuerzo al realizar la rehabilitación a fin de que la cirugía tenga buenos resultados.
La mayoría de los pacientes no sufren complicaciones derivadas de la realización de una artroscopia de hombro. Al igual que con cualquier cirugía, sin embargo, existen algunos riesgos. Estos son generalmente leves y tratables. Los problemas potenciales con la artroscopia incluyen infección, sangrado excesivo, trombos y daño a los vasos sanguíneos o nervios. Su cirujano le explicará las posibles complicaciones que pudieran sucederle antes de su operación.
Dependiendo de las condiciones de salud del paciente, el tiempo de recuperación total es diferente para cada uno de ellos. Si usted ha tenido una reparación menor, puede que no necesite demasiado tiempo y su función articular puede ser recuperada después de un corto período de rehabilitación.
Usted puede ser capaz de volver a su actividad cotidiana en pocos días tras su procedimiento quirúrgico. Se tarda más tiempo tras procedimientos más complicados. Aunque las incisiones son pequeñas en artroscopia, es posible reparar grandes daños de la articulación. La recuperación completa puede tardar varios meses.
En ocasiones puede ser un proceso lento. Seguir las directrices de su cirujano y el plan de rehabilitación es vital para un resultado exitoso.