La columna vertebral es el eje principal de nuestro cuerpo, el que nos permite tanto permanecer estables de pie como movernos con facilidad.
Si padecemos una lesión de columna vertebral, en concreto una fractura, nuestras principales funciones motoras y nuestra calidad de vida pueden verse gravemente afectadas.
Esta lesión de columna se genera cuando las vértebras se doblan o se comprimen entre ellas de forma excesiva por un impacto brusco, provocando que se rompan o se hundan. En general, las zonas más afectadas son la cervical y el dorso-lumbar.
Entre los daños adicionales que puede suponer una fractura vertebral se encuentran las lesiones de la médula espinal, daños en las raíces o en las células nerviosas, dolor de espalda, hemorragias, contusiones o desgarros.
Causas más comunes de la fractura de columna
Las causas más comunes de padecer una fractura vertebral son los impactos de alta energía en un accidente de tráfico o durante la práctica deportiva, aunque también se deben en muchas ocasiones a impactos de baja energía en pacientes que sufren un proceso degenerativo de las vértebras de la columna (osteoporosis).
Te interesa: ¿Qué debes saber de la osteoporosis?
1. Accidente de tráfico
Los traumatismos de alta energía en accidentes automovilísticos o en caídas de grandes alturas, causan comúnmente fracturas de columna vertebral.
Este tipo de accidentes provocan las llamadas fracturas de columna por comprensión, que suponen el aplastamiento de una o más vértebras. Una persona con una lesión de este tipo presenta dolor repentino y gran sensibilidad en la zona fracturada, aunque existen casos en los que no provoca síntomas.
Hay que tener en consideración que este tipo de fracturas, pueden causar lesiones de médula espinal o fracturas en más de una región de la columna.
2. Práctica deportiva
Las lesiones de columna también pueden producirse durante la práctica de una actividad deportiva por diversos factores, como un traumatismo directo o indirecto, un nivel excesivo o sobrecarga en el entrenamiento o una condición física del deportista poco favorable.
Algunas disciplinas deportivas suponen mayor riesgo a la hora de sufrir fracturas vertebrales (levantamiento de pesas), y la zona lumbar, generalmente, es la más afectada.
Te recomendamos: Deporte de fin de semana: consejos y precauciones para evitar una lesión
3. Osteoporosis
Una gran parte de las fracturas vertebrales se producen en personas de avanzada edad por la pérdida de densidad ósea y degeneración de vértebras.
La osteoporosis es una enfermedad silenciosa y progresiva que va haciendo que los huesos sean cada vez más débiles y propensos a fracturas. En estos casos, las fracturas se deben generalmente a impactos de baja densidad desde su propia altura.
Existen tres tipos principales de fractura de columna:
- Fractura por compresión: se da cuando la presión ejercida sobre la columna es mayor a lo que es capaz de soportar.
- Fractura por dislocación: sucede cuando los ligamentos o los discos intervertebrales se desgarran, llevando a los huesos a desalinearse del eje principal.
- Fractura por luxación: se produce por la separación de los ligamentos y los huesos.
Dependiendo de la gravedad de la lesión de la columna, si se encuentra lesionada completa o incompletamente, las secuelas pueden ser más o menos importantes y determinantes, llegando a provocar la parálisis de las piernas o de la totalidad del cuerpo.
¿Cómo se diagnostica una fractura de columna?
El diagnóstico inicial para una fractura de columna consiste en una exploración física y en unas radiografías.
En el caso de no conseguir un diagnóstico concluyente y necesitar más información sobre la fractura y las estructuras subyacentes, se puede optar por pruebas de imagen, como la resonancia magnética o la tomografía computada.
Finalmente, con el objetivo de conocer el estado óseo de la columna vertebral del paciente y descartar un posible caso de osteoporosis, se puede realizar una densitometría ósea.
Consecuencias de lesiones traumáticas en la médula espinal
La médula espinal es una estructura tubular constituida por nervios que conectan el encéfalo con el resto del cuerpo.
Muchas veces las fracturas de columna dañan los discos intervertebrales y los ligamentos, causando daños en los nervios espinales que conforman la médula. En la mayoría de pacientes con lesiones de médula espinal, la causa principal es un accidente de tráfico, una caída desde una gran altura o una lesión deportiva.
Las consecuencias serán más o menos graves en función del nivel de la lesión:
1. Pérdida de movilidad
Los pacientes con daños en la médula espinal pueden sufrir pérdida parcial o pérdida completa del control muscular. En el caso de la parcial, el paciente sufre debilidad muscular; sin embargo, con la pérdida completa, el paciente padece una parálisis de todos o parte de los músculos.
2. Paraplejia
La paraplejia es la pérdida total de movilidad y sensibilidad de la mitad inferior del cuerpo, afectando a las extremidades inferiores, los órganos como la vejiga o los intestinos y pudiendo afectar también al abdomen.
Este tipo de parálisis puede ser permanente, en casos de comprensión de la médula espinal, aunque hay pacientes que logran recuperar la movilidad a través de la cirugía.
Suele ser producida por una lesión a nivel del tórax.
3. Tetraplejia
La tetraplejia consiste en la pérdida total o parcial de la movilidad y la sensibilidad en las extremidades y el torso.
Los pacientes pierden el control total de estas funciones anatómicas: vejiga, intestinos, función sexual, digestión, respiración, movilidad y sensibilidad.
Suele ser producida por una lesión a nivel cervical.
Rehabilitación
Una vez consolidada la fractura, el paciente debe trabajar para recuperar la movilidad al completo. La necesidad de rehabilitación irá ligada al grado, causa, localización y características de la fractura vertebral.
Los ejercicios siempre irán guiados por un fisioterapeuta y se adaptarán a las necesidades de cada paciente:
- Ejercicios de flexibilidad
- Ejercicios de fuerza
- Ejercicios de estiramiento
- Ejercicios posturales
- Ejercicios para prevenir caídas
Esperamos que este artículo te haya sido de utilidad para conocer qué sucede si una columna vertebral se fractura. Desde Traumavance, estamos a tu disposición para lo que necesites. ¡Llámanos!