Practicar deporte tiene muchísimos beneficios en nuestro cuerpo, ayudándonos a tener una buena salud. No obstante, durante la actividad deportiva, la articulación de la rodilla puede verse perjudicada si no se siguen buenos hábitos. En este artículo desde Traumavance, te ofrecemos 10 consejos para prevenir este tipo de lesiones.
Como ya sabrás, la rodilla es una articulación “de carga”, es decir, soporta el peso de nuestro cuerpo. Además, está implicada en una gran cantidad de prácticas deportivas, por lo que tiene mayores posibilidades de experimentar una lesión que otras. Por ello, queremos ayudarte a evitar las lesiones de rodilla durante la práctica de deporte con una serie de recomendaciones.
9 recomendaciones para evitar las lesiones de rodilla al hacer deporte
Para evitar las lesiones de rodilla al realizar deporte, desde Traumavance te mostramos algunos consejos que puedes llevar a cabo para prevenirlas.
1. Técnica
Todo ejercicio requiere de una técnica adecuada. Esta, además de ayudar a fortalecer ciertas partes del cuerpo, es imprescindible para prevenir lesiones. Por ejemplo, si practicas un deporte como el levantamiento de pesas, una mala técnica puede hacer que las rodillas carguen todo el peso. Sobrecargar las rodillas aumenta en gran medida la posibilidad de sufrir una lesión.
Esta situación también se da en otro tipo de prácticas deportivas, como correr o jugar al tenis. En estos casos, una mala postura o una pisada equivocada puede llevar a una lesión de rodilla a la larga como, por ejemplo, la tendinitis.
Por ello, es imprescindible adquirir una buena técnica cuando se está aprendiendo a realizar un deporte. Es aconsejable que sea un profesional el que de las pautas para practicar ejercicio de manera adecuada.
2. Usar el calzado adecuado
La pisada tiene una gran influencia en la articulación de la rodilla, por lo que debemos prestar atención a nuestros pies durante el ejercicio. Un buen calzado, que se ajuste bien, hará que pisemos mejor. También es importante que el zapato tenga una función amortiguadora y evite que el impacto en el suelo perjudique a la rodilla.
Además, es necesario atender de manera rápida cualquier problema que aparezca en los pies, como las ampollas. Nuestro cuerpo evita inconscientemente realizar un apoyo sobre la zona dolorida, algo que modifica la pisada y puede tener consecuencias negativas para la rodilla.
3. Controlar el sobrepeso
Las rodillas cargan con todo el peso del cuerpo, por lo que el sobrepeso aumenta la presión sobre ellas. Durante la práctica de deporte, este efecto aumenta.
Combinar el ejercicio con una dieta saludable enfocada a la pérdida de peso puede ser una buena opción para ir disminuyendo la presión sobre las rodillas y así evitar lesiones. Pero siempre acompañados de la supervisión de un profesional.
4. Calentamiento
El calentamiento previo al ejercicio aumenta el flujo sanguíneo en los músculos que se van a usar durante la práctica deportiva. De esta forma, el cuerpo se prepara para hacer deporte, lo que reduce hasta en un 27% la probabilidad de sufrir lesiones.
Realizar deporte sin un calentamiento previo puede aumentar las probabilidades de sufrir daños en la rodilla, como la lesión de menisco.
Si te duele la rodilla y crees que puedes estar sufriendo una lesión de menisco, no te pierdas el artículo: “Me duele la rodilla, ¿puedo tener una patología de menisco?
Dependiendo del ejercicio que se vaya a practicar, existen diferentes tipos de calentamiento, por lo que es aconsejable que te informes sobre cuál es el más adecuado para proteger tus rodillas en función del deporte que vayas a realizar.
5. Estiramientos tras hacer deporte
Al igual que es importante preparar los músculos antes de la actividad física, también debes tener una rutina de enfriamiento una vez termines el entrenamiento.
Los estiramientos, tanto antes como después del deporte, sirven para ganar flexibilidad en los músculos y aliviar tensiones, lo que reduce el riesgo de experimentar una lesión. Para proteger la rodilla, es aconsejable realizar un adecuado estiramiento de los músculos de la parte trasera de la pierna.
El estiramiento no debe resultar doloroso, pero sí es necesario sentir que el músculo está estirado. La mayoría de las rutinas consisten en estirar lentamente el músculo y mantenerlo en esta posición durante unos 30 segundos.
6. Tener claro tus límites
Uno de los elementos más motivadores en el deporte es buscar nuevos retos y metas. No obstante, cuando quieras subir el nivel de actividad física, lo mejor es hacerlo de manera progresiva.
En este aspecto, debes ser cuidadoso para no sobreexigir a tu cuerpo, ya que esto puede derivar en una lesión. Cuando estés practicando deporte, presta mucha atención a las posibles molestias que puedas sufrir, estas son un indicativo de que podrías estar excediéndote en tus límites.
7. Cuidar el tono muscular
Una musculatura fuerte y flexible te ayuda a mantener una postura correcta durante el ejercicio y evita sobrecargas en las rodillas. Mantén tonificado los músculos de la cadera, los muslos, los glúteos y la espalda para proteger la articulación de la rodilla.
Existen ciertos deportes indicados para conseguir tono muscular sin sobrecargar las articulaciones, como por ejemplo, la natación.
8. Sé precavido tras una lesión
Si ya has tenido una lesión de rodilla, debes volver a la actividad física con precaución. Por supuesto, antes de realizar deporte necesitas la autorización de tu médico, que es el que debe certificar que tu articulación está preparada para hacer ejercicio de nuevo.
Realizar deporte cuando la lesión no está completamente sanada, aumenta notablemente el riesgo de recaída, por lo que tómate el tiempo necesario para que tu articulación esté preparada de nuevo.
Cuando finalmente retomes la práctica de hacer deporte, hazlo progresivamente y prestando mucha atención al estado de tu rodilla.
9. Asistir a la consulta de un médico en caso de sufrir molestias
A pesar de seguir estos consejos, si en algún momento sientes molestias en la zona de la rodilla, no dudes en visitar a un traumatólogo experto en patologías asociadas con el deporte. Asistir al médico a tiempo puede salvarte de sufrir una lesión o evitar que el daño en la rodilla empeore.
Desde Traumavance, ponemos a tu disposición nuestro equipo de profesionales para encontrar el mejor tratamiento para tus lesiones deportivas. Contacta con nosotros y estudiaremos tu caso en profundidad.
Ahora bien, si estás interesado en conocer cuáles son las patologías más comunes en la rodilla, no te pierdas el artículo: “¿Cuáles son las lesiones de rodillas más frecuentes?”