Una distensión de rodilla, conocida también como esguince de rodilla, puede ocurrirle a cualquier persona debido a un movimiento inadecuado. Por ello, desde Traumavance, te explicamos, en este artículo, cuáles son sus causas, síntomas y las opciones de tratamientos disponibles que existen para superar esta lesión. ¡No te lo pierdas!
¿Qué es una distensión de rodilla?
Una distensión de rodilla, también llamada esguince de rodilla, es una lesión que se produce cuando los ligamentos de alrededor de la articulación de la rodilla se estiran o rompen debido a una fuerza excesiva o a un movimiento violento.
Los ligamentos son estructuras de tejido conectivo resistente y elástico que unen los huesos y estabilizan las articulaciones. En la rodilla, los principales ligamentos son el ligamento colateral medial (LCM) en el lado interno, el ligamento colateral lateral (LCL) en el lado externo, y los ligamentos cruzados anteriores (LCA) y posteriores (LCP) en el interior de la articulación.
Causas de la distensión de rodilla
Una distensión de rodilla puede ser provocada por varias razones relacionadas con fuerzas externas o movimientos bruscos que afectan a los ligamentos de la rodilla. Las causas más comunes incluyen:
- Impacto directo: un golpe fuerte en la rodilla, como resultado de una caída, un accidente vehicular o una colisión durante un deporte, puede estirar los ligamentos.
- Giro o rotación repentina: movimientos rápidos de giro o rotación en la rodilla, especialmente si el pie está fijo en el suelo, pueden estresar los ligamentos y provocar una distensión. Esto es frecuente en deportes como el fútbol, el baloncesto y el esquí.
- Hiperextensión: estirar la rodilla hacia atrás más allá de su rango normal de movimiento puede dañar los ligamentos.
- Sobreesfuerzo: realizar actividades físicas intensas o levantar objetos pesados sin un calentamiento adecuado puede aumentar la probabilidad de sufrir una distensión de rodilla.
- Deslizamiento o torsión del pie: si el pie se desliza o gira mientras soporta peso, puede generar torsión en la rodilla y causar una distensión.
- Debilidad muscular o desequilibrios: la falta de fuerza en los músculos alrededor de la rodilla o desequilibrios en la musculatura que sostiene la articulación pueden hacer que los ligamentos sean más vulnerables a lesiones.
- Participación en deportes de alto impacto: los deportistas de disciplinas de alto impacto, como el fútbol, el baloncesto, el rugby o el esquí, enfrentan un mayor riesgo debido a los movimientos bruscos y a las frecuentes colisiones.
- Fatiga muscular: el cansancio puede afectar la estabilidad de la rodilla y aumentar el riesgo de lesiones en los ligamentos.
Para prevenir las distensiones de rodilla, es esencial realizar un calentamiento adecuado antes de la actividad física, usar el equipo de protección necesario, fortalecer los músculos de alrededor de la rodilla y mantener una técnica correcta durante el deporte.
Te recomendamos: Cómo practicar esquí y otros deportes de invierno sin riesgo de lesión
Síntomas de una distensión de rodilla
Es crucial identificar una distensión de rodilla de manera temprana para evitar un agravamiento de la lesión. Los síntomas pueden variar según la gravedad, pero normalmente incluyen:
- Dolor: es uno de los síntomas más frecuentes, que puede ir desde leve hasta severo, especialmente al mover la articulación o al cargar peso sobre la pierna afectada.
- Hinchazón: la acumulación de líquido puede causar hinchazón alrededor de la rodilla, que puede ser inmediata o aparecer en las horas posteriores a la lesión.
- Limitación en el movimiento: la distensión puede restringir el rango de movimiento de la rodilla, dificultando el doblar o extender completamente la pierna afectada.
- Inestabilidad: la rodilla puede sentirse inestable o débil, haciendo difícil mantenerse de pie o caminar sin cojear.
- Sonido de “pop” o “crack”: algunas personas reportan haber escuchado un sonido característico durante la lesión, lo que podría señalar un desgarro ligamentoso.
- Hormigueo o entumecimiento: sensaciones de hormigueo o entumecimiento alrededor de la rodilla pueden indicar daño en los nervios cercanos.
- Debilidad muscular: la debilidad en los músculos que rodean la rodilla puede ser un signo de daño significativo en los ligamentos.
- Moretones: pueden aparecer moretones debido a la acumulación de sangre por la lesión en los vasos sanguíneos cercanos.
Si experimentas alguno de estos síntomas tras una lesión en la rodilla, es fundamental consultar a un profesional médico. El diagnóstico adecuado a menudo requiere un examen físico, pruebas de diagnóstico como resonancias magnéticas o radiografías, y un tratamiento oportuno para asegurar una recuperación efectiva y prevenir complicaciones.
Te interesa: 9 consejos para evitar las lesiones de rodilla al hacer deporte
Principales tratamientos para una distensión de rodilla
El tratamiento depende de la gravedad de la distensión y generalmente busca aliviar el dolor, reducir la hinchazón, restaurar la movilidad y prevenir la inestabilidad. Los principales enfoques incluyen:
Descanso
Evita actividades que puedan agravar la lesión; puede ser necesario usar muletas para no cargar peso en la pierna afectada.
Hielo
Aplica hielo en la rodilla durante 15-20 minutos cada 2-3 horas en los primeros días para reducir la hinchazón y el dolor.
Compresión
Usa una venda elástica para comprimir la rodilla sin apretar demasiado para evitar problemas circulatorios.
Elevación
Mantén la pierna elevada para reducir la hinchazón, colocando almohadas debajo de la pierna al estar sentado o acostado.
Medicamentos
- Antiinflamatorios: como el ibuprofeno o el naproxeno, ayudan a aliviar el dolor y la inflamación.
- Analgésicos: pueden ser recetados para controlar el dolor si los antiinflamatorios no son suficientes.
Fisioterapia
Un fisioterapeuta puede ofrecer ejercicios de rehabilitación para fortalecer los músculos alrededor de la rodilla y mejorar la estabilidad de la articulación, además de técnicas manuales y electroterapia para reducir dolor e inflamación.
Inyecciones de corticosteroides
En algunos casos, se pueden utilizar para disminuir la inflamación y el dolor en la articulación.
Dispositivos de apoyo
Se puede recomendar el uso de una rodillera, una férula o muletas para mejorar la movilidad y estabilizar la rodilla durante la recuperación.
Cirugía
En casos graves con desgarros significativos, puede ser necesaria una cirugía para reparar o reconstruir los ligamentos, generalmente realizada mediante artroscopia.
No te pierdas: Tiempo de recuperación tras una artroscopia de rodilla
Rehabilitación postoperatoria
Después de la cirugía, la fisioterapia es esencial para restaurar la fuerza, el rango de movimiento y la estabilidad de la rodilla.
Desde Traumavance esperamos que este artículo te haya sido de utilidad para conocer en qué consiste la distensión de rodilla. Ahora bien, si sospechas que has sufrido un esguince de rodilla, es fundamental que busques atención médica para obtener un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.