Las lesiones deportivas suelen ser delicadas y requieren de una atención rápida, debido a que el deportista necesita una ligera y correcta recuperación para poder continuar haciendo deporte con normalidad. Una de las lesiones más habituales son las de hombro. En este artículo te contamos las más frecuentes.

¿Con qué deportes se lesionan más los hombros?

Partiendo de la base de que en la práctica deportiva trabajamos todo nuestro cuerpo, no existe ningún deporte que esté exento de causar una lesión de hombro. No obstante, hay determinadas prácticas deportivas que suponen un mayor riesgo para los hombros. Por ello, se pueden hacer dos grandes grupos de actividades deportivas que pueden llevar a una lesión de hombro.

Por una parte, están los deportes en los que el hombro tiene una gran importancia y por lo tanto se lesionan por un sobre uso de la articulación. En este grupo se incluyen deportes de lanzamiento como el waterpolo, el balonmano o el béisbol y los deportes que implican un movimiento repetitivo del hombro, como el tenis, la natación y el baloncesto.

Por otra parte, se encuentran las lesiones traumáticas de hombro, que se producen en deportes que tienen riesgos de caída sobre un hombro, como por ejemplo el ciclismo o el snowboard.

Las lesiones de hombro más comunes en deportistas

A continuación te hablamos de las lesiones deportivas de hombro más habituales.

Tendinitis del manguito rotador

El manguito rotador es un grupo de músculos y tendones que rodean la articulación del hombro, este se encarga de sujetar la articulación y de permitir el movimiento del brazo y el hombro.

La tendinitis del manguito rotador se da cuando alguno de los tendones del manguito se inflama, habitualmente este tipo de lesión se produce en deportes que implican un movimiento repetitivo con el hombro.

Algunos de los síntomas son la inflamación local y el dolor a la presión en la parte frontal del hombro. Los signos de lesión pueden aparecer de forma leve e ir empeorando con el tiempo, llegando a causar dolores que impidan el sueño, la pérdida de movilidad y la rigidez.

El tratamiento para esta lesión suele ser conservador en un principio, con terapia física, reposo y antinflamatorios. Si este tratamiento no funciona, se recurre a la cirugía, que generalmente se realiza mediante artroscopia.

Rotura o desgarro del manguito rotador

La rotura o desgarro se da cuando uno de los tendones del manguito rotador se rompe de forma parcial o total. Una de las causas más habituales suelen ser de origen traumático, como por ejemplo tras una caída fuerte sobre el hombro o sobre la mano o el codo con el brazo estirado. Otro motivo frecuente son los micro traumatismos, es decir, pequeñas lesiones que se van produciendo por un movimiento repetitivo, por ejemplo, al jugar al baloncesto, y que derivan en una rotura o desgarro del tendón.

Los síntomas de una rotura son parecidos a los de la tendinitis, las molestias principales que manifiestan los pacientes con esta patología son el dolor y la limitación en los movimientos del brazo.

Una vez que se rompe un tendón, este no se vuelve a unir de manera natural, por lo que el tratamiento conservador siempre va enfocado a reducir la inflamación y recuperar tanto la movilidad como la fuerza en el hombro. Esto se consigue fortaleciendo los músculos que rodean al tendón lesionado y haciendo ejercicios orientados a ampliar el rango de movimiento. También se incluyen en el tratamiento fármacos como antiinflamatorios.

Dado que hablamos de deportistas, posiblemente el traumatólogo especialista encargado del tratamiento, evalúe si es necesario o no una intervención quirúrgica para volver a unir el tendón desgarrado. La cirugía suele hacerse con artroscopia y en ella el cirujano valora la lesión y realiza una sutura del tendón que permita la mayor funcionalidad del hombro.

Tendinitis del bíceps

La tendinitis del bíceps consiste en la inflamación del tendón de la porción larga del bíceps, que generalmente está ligada a otras lesiones del manguito rotador. Esta es una lesión que suele darse por actividades repetitivas sobre el nivel del hombro, en deportes como la natación, el vóleibol, el golf y el tenis.

Si esta lesión no es atendida en el momento, puede derivar en una dolencia crónica (tendinosis), por lo que es fundamental tratarla con la aparición de los primeros síntomas. Estas señales pueden ser dolor e inflamación en el hombro y el codo y sensación de debilidad en esa misma zona.

Esta es una enfermedad que se trata en la mayoría de los casos de forma conservadora, con reposo, medicación antiinflamatoria y fisioterapia. Si se da dolor agudo, también se puede recurrir a las infiltraciones con corticoides.

Luxación o subluxación de hombro

Cuando la cabeza del húmero se sale de la cavidad glenoidea nos encontramos antes una luxación de hombro. Esta es una de las lesiones más habituales en deportes de contacto, como el balonmano, el rugby o el judo.

La luxación se suele producir por un traumatismo, en el momento en el que se sufre el golpe o la caída, el principal síntoma es un dolor intenso, seguido por una pérdida de la funcionalidad del hombro.

Lo primero que se debe de hacer ante una luxación de hombro es ir a un traumatólogo especialista que se encargue de colocarlo y establezca un tratamiento. En los casos en los que esta lesión sea repetitiva o cause una inestabilidad de hombro, se puede recurrir a la cirugía, principalmente por artroscopia, aunque se debe recurrir a la cirugía abierta con la técnica de Latarjet o la técnica de Mc Laughlin para casos complejos.

¿Qué hacer ante una lesión deportiva de hombro?

Para todos es importante atender cualquier patología traumatológica a tiempo, ya que de lo contrario puede derivar en lesiones más graves. En el caso de los deportistas, una atención temprana a sus dolencias es aún más importante, ya que en la práctica deportiva es necesario tener el cuerpo siempre a punto.

Nuestro consejo es que ante la aparición de cualquier síntoma en el hombro acudas a un centro especializado en traumatología. De esta forma, un equipo especializado se encargará de realizar un diagnóstico y ofrecerte el tratamiento que más te convenga.

No dudes en contactar con nosotros para hablarnos sobre tus lesiones. ¡Estamos encantados de ayudarte!